Variadas son las formas en las que se entrena para un mismo objetivo. Variados son los argumentos que sustentan unas teorías y otras para justificar esas rutinas de entrenamiento. Pero qué sabemos objetivamente hasta ahora desde un punto de vista exclusivamente fisiológico?

El estrés mecánico es un estímulo potente para la síntesis proteica, y aunque no esté del todo claro cual es el umbral en el que ese estrés trabaja de forma óptima, lo cierto es que lo hace y por tanto la movilización de una carga durante un tiempo determinado genera una tensión muscular que se filia de forma positiva con el aumento de las señales nucleares de las células musculares para el aumento de proteínas contráctiles.

Este estímulo mecánico que va a generar esa cascada de señales juegan un rol fundamental los costámeros. Este conjunto de proteínas estructurales ligan los sarcómeros, que son las unidades  contráctiles del músculo con la membrana de la célula muscular o sarcolema. Es verdad que están en realidad integrados en un sistema proteíco complejo que tiene como misión unir el sarcómero con la matriz extracelular y por tanto son, junto a otros elementos de este sistema, blanco de fármacos en experimentación para el tratamiento de problemas distróficos cuyo origen está en este mecanismo de señailización. Tema que excede este artículo.

La hipertrofia entonces habrá que entenderla como un exquisito juego de señalizaciones que se inicia con este estímulo percibido en la relación sarcomero /sarcolema.

Es entonces la contracción muscular y el estímulo recibido por la relación sarcómero/sarcolema, a través de proteínas como los costámeros quienes generan la señal a moléculas citoplasmáticas. Estas moléculas representan la verdadera ruta anabólica y de ella depende la generación de células satélites y la síntesis de proteínas contráctiles, los dos pilares de la hipertrofia muscular.

Cierto es que la síntesis proteica se ve favorecida por un entorno hormonal andrógenico positivo, pero hay que destacar que la vía mTOR no responde a este entorno sino a factores de crecimiento tipo IGF-1. Es de capital importancia entender este concepto ya que si bien los receptores androgénicos darán inusuales señales de estímulos ARNm que proponen una importante síntesis proteíca, el crecimiento muscular que depende del estímulo de entrenamiento es dependiente de la aceleración de la vía mTOR y factores de crecimiento.

De cómo el músculo opera entre la caída del potencial energético, la reparación del daño muscular y la ingesta de suplementación proteíca para facilitar el crecimiento, hablaremos cuando nos refiramos a hipertrofia y nutrición.

En resumen, el estímulo mecánico implica el disparo a un estímulo que las vías intracitoplasmáticas, básicamente la mTOR (aunque no la única) recogen para facilitar la señal nuclear de la que depende la hipertrofia muscular

1.- La creación de células satélites

2.- La síntesis de proteínas contráctiles.

Cuál es ese estímulo generador? Todas las fibras musculares generan hipertrofia?

En hipertrofia y entrenamiento te lo contamos.